Capítulo 691 
Tania le hizo señas a Aspen y se metió al carro que estaba estacionado,  
 
“¿Qué tan urgente es para que me llames a estas horas?” 
Aspen acababa de mandarle un mensaje para encontrarse abajo de su edificio. 
Sin responder directamente, Aspen preguntó, “¿Carol ya se durmió?” 
“Cuando bajé, todavía estaba viendo a los niños. Le dije que me quedaría esta noche en casa de mis padres. Seguí tu consejo y no le dije que me buscabas, y no sospechó nada.” 
“¡Qué leal eres! ¿Tienes prisa por volver? Si no es así, te invito a tomar algo.” 
Tania rechazó la oferta sin titubear, 

“Nosotros no vamos, mejor invita a Carol la próxima vez. Además, tengo prisa por volver a casa, mi prima todavía está con mis padres. ¿Para qué me buscabas?” 
Después de un breve silencio, Aspen sonrió y dijo, 
“Carol y yo estamos saliendo.” 
Tania se sorprendió, “¿Qué?!” 
La felicidad era evidente en el rostro de Aspen, “Ella aceptó salir conmigo, ahora es mi novia.” 
Los ojos de Tania se abrieron de par en par, “¿En serio?” 
“Sí, pero ella dijo que por ahora debemos mantenerlo en secreto, no podemos dejar que los niños se enteren todavía.” 
Tania tardó un momento en responder, 
“No me extraña que Carol se haya puesto nerviosa cuando me vio. Así que empezaron a salir a escondidas, jaja, ustedes dos están destinados. Parece que el destino ya los había atado, ¡están hechos el uno para el otro!” 
Aspen disfrutaba escuchar eso, “Entonces, dí más cosas así.” 
Tania rápidamente pasó al modo ‘bendición‘ y comenzó a decir un montón de cosas bonitas. 
La sonrisa de Aspen no desaparecía, aunque todavía sospechaba de Tania con el hombre misterioso, sabía que Tania no tenía segundas intenciones con Carol. 
“Gracias, cuando ella esté lista para hacerlo público, te invitaré a celebrar.” 
“¡Por supuesto! ¿Eso fue todo lo que querías decirme?” 
Aspen fue al grano, “¿Quién crees que es mejor para ella, yo o su esposo?” 
“¿Su esposo?” 
“Sí, el padre de Laín, Ledo y Luca.” 
Tania se quedo atónita, “El padre de los niños es…” 
Aspen la miró fijamente, “¿Es qué?” 
Tanía tragó saliva antes de responder, ¿Qué te dijo Carol sobre su esposo?” 
“No habló con detalle, antes afirmó que estaba muerto, pero hoy me dijo que su esposo está vivo y los dos aún no se 
han divorciado.” 
“¿Carol te dijo que los tres pequeñínes son hijos de su esposo?” 
“¿No lo son?” 
Tania quedó en silencio; ella, al igual que Carol, aunque no era muy astuta, tampoco era tonta. Inmediatamente se dic cuenta de que Carol no le había contado toda la verdad a Aspen. 
Ella entendía a Carol; Carol amaba demasiado a sus hijos como para exponerlos hasta que fuera absolutamente 
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necesario. 
Incluso en su relación amorosal 
Tania aclaró su garganta para cambiar de tema y hablar del esposo de Carol, 
“Si me lo preguntas, definitivamente creo que tú y Carol son más compatibles. Ese esposo suyo es un completo desastre! ¡Un verdadero patán que no merece a Caroll” 
Podrías decir que lo de Aspen con Carol fue un error forzado por las circunstancias y hasta cierto punto comprensible. 
¡Pero el esposo de Carol no tiene excusa! 
¿Cómo se puede llamar infidelidad si Carol fue forzada? ¿Querer divorciarse pero luego desprestigiar a Carol sin dejarla ir? ¡Es de locos! 
Aspen sabía por qué Tania decía eso y preguntó, 
“¿Sabes quién es su esposo?” 
Desde que Carol se lo mencionó, Aspen había intentado investigarlo, pero no encontró nada,