Capítulo 999“Lo hizo, pero eso fue con la condición de que Krystal no se disculpara. Krystal se disculpó con la señora Wendy”.Brent negó con la cabeza. “¿Crees que fue una disculpa sincera?”“No me parece. Si realmente es culpa de Krystal, ¿qué debemos hacer?Brent suspiró. “Ella debería asumir la responsabilidad ella misma. Dígale que se disculpe sinceramente con la señora Wendy”.Entró en la habitación donde descansaba el débil Ethan. Ethan no sabía lo que pasó allí.Brent lo saludó como siempre cuando entró a la habitación, “Sr. Miller, soy yo”.“Lo sé.” Ethan pudo reconocer los pasos del dúo. No era tan débil como pensaba Brent.“¿Cómo te sientes hoy?”Ethan cerró los ojos y frunció el ceño. “Malo. El dolor de cabeza me está matando”.Las marcas en su rostro se hicieron más claras. Debería estar mejorando porque se eliminó la mayor parte del veneno.Brent se preguntó: “¿Por qué el cutis del señor Miller tiene mal aspecto?”.“Esperar. Llamaré al médico”.“Bueno.”A Brent no le importaba nada el incidente de Krystal mientras corría hacia el laboratorio de Olivia.Estaba leyendo un libro de medicina mientras preparaba medicamentos.No sólo practicaba la medicina herbaria, sino que también se destacaba en la medicina moderna.Incluso inventó su propio tratamiento para alguna enfermedad.Al darse cuenta del ansioso Brent, pensó que algo andaba mal con Ethan.Ese era el único asunto que podía poner ansioso al hombre tranquilo y sereno.“¿Qué ocurre?” Deslizó un marcador entre las páginas antes de levantarse. “Algo anda mal con el señor Miller. Por favor, ven conmigo.”Ella ya se dirigía a la habitación. “Bueno. Cuida el fuego por mí. No dejes que nadie se acerque a la medicina”.Aunque era su territorio, también podían ocurrir accidentes imprevistos. La desintoxicación de Ethan aún no había terminado. Si alguien cambiara los ingredientes del medicamento, podría costarle la vida.“Está bien”, respondió Brent.Olivia entró corriendo a la casa con pasos ligeros.“¿Vanessa?” preguntó Ethan. Estaba alerta porque no podía ver.“Si, soy yo.” Olivia se acercó a él. Olía a hierbas.La expresión de Ethan cambió ligeramente cuando el leve olor flotó en su nariz.¡Era el mismo aroma que olía en su sueño!No era el olor a hierbas medicinales.Olivia había estado rodeada de hierbas las 24 horas del día durante los últimos tres años.Como también estaba tomando medicamentos, tenía un olor corporal distintivo similar al de las hierbas.Ni siquiera un perfumista podría crear ese aroma.Olivia no notó nada en particular porque estaba acostumbrada.Además, rara vez interactuaba íntimamente con los demás. Sólo las personas cercanas a ella en la distancia podían olerlo.Ansiosa, se inclinó hacia él para controlarlo sin importarle sus emociones.Ella abrió más sus párpados para observar sus orbes mientras le preguntaba: “¿Dónde te sientes incómodo?”Su largo mechón de cabello rozó su cuello cuando ella se inclinó. Era tan ligero como una pluma, de ahí la sensación de cosquillas.Ethan recuperó sus sentidos y miró en su dirección.Todo lo que pudo ver fue una cara borrosa.“Tengo un fuerte dolor de cabeza y se me revuelve el estómago. Yo tampoco tengo apetito”.“Abre la boca y muéstrame tu lengua”.Ella le agarró la barbilla. Sus dedos fríos lo impulsaron a abrir la boca.Podía verla acercarse a él y sentir su respiración.Ella lo soltó antes de anunciar solemnemente: “Tengo que revisar tu cuerpo”.Sorprendentemente, esta vez no la detuvo mientras le desabrochaba los botones.¡Era la misma forma en que Olivia se quitaba la ropa en el pasado!