Capítulo 636
¿Estás pensando si realmente le gustas o no?”
*…* Aunque Carol se sintió un poco incómoda, asintió con la cabeza.
Tania, sentada al borde de la cama, le dijo: “¡Pregúntale directamente!”
“¿Eh?”
“Ve al grano! No importa si le gustas o no, su respuesta te dará paz. Aunque… quizás solo reaccionó así porque lo provocaron, pero tengo la sensación de que si le gustas.”
Tania no pudo evitar entrar en chismes,
“Y si realmente le gustas, ¿qué vas a hacer?”
“Yo… no sé.”
“Mira cómo dudas ya. ¡Recuerda cuando te dije que deberían estar juntos y tú ni lo considerabas! Estabas totalmente decidida, diciendo que jamás estarías con él.”
Carol:*…*
Tania continuó:
“Tu actitud y tus sentimientos hacia él han cambiado, eso significa que sí sientes algo por él. Tal vez no te has dado cuenta porque no es tan profundo aún, pero, pase lo que pase, yo apoyo que estén juntos.”
“¿Por qué?”
“Primero que nada, físicamente hacen buena pareja. Además, al fin y al cabo, él es el padre de tus hijos. Aunque haya quebrado, no está tan mal como para dejarlos sin comer. ¡Todavía tiene su apartamentico y un carro para moverse!
Además, está claro que sientes algo por él y si él también siente lo mismo, definitivamente tienen que intentarlo. ¡Qué suerte que la persona que te gusta también sienta lo mismo por ti! No se puede dejar pasar.”
Carol frunció el ceño, “Pero antes…”
“Deja el pasado atrás, hay que vivir el presente. Además, ya sabes, lo del aeropuerto tenía su razón de ser.”
Carol protestó, “La última vez dijiste que solo importaba el resultado.”
Tania rio, “Eso fue cuando no te gustaba.”
Carol, sonrojada, murmuró, “Aún no me gusta.”
Tania le hizo una mueca, y Carol cambió de tema rápidamente, “Primero tengo que saber qué piensa él realmente.”
*Siga mi consejo, pregúntale directo si le gustas y que te dé una respuesta clara.”
“¿Y si dice que no? ¡Qué vergüenza!”
*La vergüenza es momentánea, mejor que estar siempre en dúda. Además, ¿qué tiene de malo? No vas a declararte, solo vas a preguntar.”
Carol se sintió tentada, mejor un dolor breve que una larga angustia. Debería aclarar sus sentimientos de una vez por todas.
¡Ya basta de darle vueltas al asunto en la cabeza!
“Cuando vuelva, le preguntaré.”
“Eso es! ¡Tienes todo mi apoyo, amiga!”
Después de esto, Carol se calmó un poco y preguntó por cómo iban las cosas con Rick.
Fue entonces cuando Tania recordó,
“Si no me hubieras mencionado a Rick ni me acordaba. Rick me dijo que le diera las gracias al padre de Miro por todo. También me dijo que te dijera que ya está todo superado, que no te sientas culpable.”
Carol frunció el ceño, “…” Eso solo la hacía sentirse más culpable.
“¿Y los cuidadores?”
“Rick dejó una, los demás los mandó a casa Dijo que no necesitaba tantos, que tenerlos todos era un desperdicio.”
Después de hablar un rato más, Tania bajó a buscar un paquete y Carol fue a la cocina a preparar el almuerzo.
Mientras cocinaba, Carol se motivaba a sí misma:
No hay nada de qué sentirse nerviosa, somos adultos. Hay que ir al grano, cuando lo vea le preguntaré directamente, inada de acobardarse!