Capitulo 310
“Claro,” asenti.
Voy a confiar en tl.
“Vamos a casa…“, susurré.
Las manos de Kent estaban temblorosas, supongo que ya casi no podia aguantar.
Como era de esperar, apenas salimos, Renan y la gente del psiquiátrico llegaron.
Justo a tiempo.
*Se escapó del psiquiátrico, supuse que vendría a buscarte.” Renan frunció el ceño, su voz grave, y miraba a Kent con frialdad.
*Pizarro ya retiró la denuncia, enseguida se pueden arreglar los papeles, yo me lo llevo a casa, no necesitamos internario!” Dije apretando la mano de Kent cada vez más fuerte,
No iba a permitir que se lo llevaran de nuevo.
“Lo siento, nuestro hospital tiene sus normas.” Quien entró fue Quique.
Quique parecía muy tranquilo, como si intencionalmente hubiera dejado escapar a una mascota solo para ir a capturarla después.
Nos dio una mirada llena de significado a Kent y luego sonrió. “Kent, es hora de volver, golvidaste lo que habíamos hablado?”
Instintivamente miré hacia atrás a Kent. “No le hagas caso, no lo mires…”
Sospechaba que Quique estaba hipnotizando a Kent.
Los dedos de Kent se tensaron un momento y luego soltaron mi mano.
Mi corazón casi salta por la boca, desesperada le hice señas a Kent con la cabeza.
*¡Quique, eres un desgraciado, que le has hecho!” Grité, intentando atacar a Quique, pero alguien me agarró por el cuello de la camisa.
Miré hacia atrás, sorprendida y asustada, a Kent.
Me tomó en sus brazos y me abrazó con fuerza.
Parecía que estaba al limite, pero protegerme se habla convertido en su instinto subconsciente.
Con los ojos ardiendo furiosamente, me volvi hacia Quique. “Loco…”
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Quique frunció el ceño, también parecía incrédulo, y preguntó en voz baja a la persona que tenía a su lado. “¿Qué dosis?”
“Ya aumentamos la medicación…” dijo el médico a su lado, nervioso.
Quique miró la hora.
“Je…” soltó una risa fría. “Una vez que el ácido gamma–hidroxibutirico entra al cuerpo, los compuestos químicos del medicamento inducen una polarización de las neuronas, alterando los polos positivos y negativos dentro y fuera de la membrana celular…”
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Capitulo 310
Miré a Quique con precaución, toda temblando.
“Esto causa un bloqueo de los canales de iones, ralentizando la transmisión de mensajes entre el cerebro y el sistema nervioso central…”
“Una persona normal en pocos minutos actuaria como si estuviera borracha, con una disminución de la excitación cerebral y la percepción del cuerpo inhibida…”
Aprieto mis manos con fuerza, los ojos rojos, mirando hacia atrás a Kent..
Ya casi no podía mantenerse en pie, apoyándose en mi, pero aun asi me protegia con determinación. los ojos inyectados en sangre.
“A medida que su nivel de azúcar en sangre aumente, su respiración se volverá más lenta y profunda, y su corazón empezará a ralentizarse…”
Quique describió con calma la situación de Kent.
“Pero él después de sufrir un ataque y de haber usado medicamentos psiquiátricos de manera apropiada, hasta que escapó del psiquiátrico y te encontro… todo ese tiempo. veintitres minutos.”
Lo que sorprendió a Quique fue el nivel de control que Kent tenia sobre su cuerpo y la alta concentración de su mente.
Para Quique, eso era un fenómeno aterrador, porque nadie… ningún ser humano, puede resistirse a los compuestos químicos.
Inyectado con altas dosis de medicamento, una persona entra en un estado de vertigo extremo, perdiendo lentamente su inteligencia y memoria, como un bebé sin conciencia.
A merced de otros…
Es más, durante el tiempo que Kent estuvo en el manicomio, Quique hizo algo mas que controlarlo con medicación.
También hubo intervención psicológica y terapia de hipnosis.
“Quiero ver cuánto tiempo puede aguantar.” De repente, Quique se emocionó. deteniendo a su gente antes de que se llevaran a Kent.
Me sonrió, mirando el reloj. “Kent, ven aqui.”
Su voz, como en el experimento del perro de Pavlov con una campana, haria que una persona que está perdiendo la conciencia obedezca sus órdenes.
Sabia que Quique me estaba desafiando.
Quería que yo supiera que los sentimientos humanos nunca pueden luchar contra los compuestos. químicos.